La Reina Isabel II incluye caza en su menú para la cena

Según uno de sus antiguos chefs, ella consume alimentos sencillos, pero hay algo que no ‘tolera’.

La Reina Isabel II no solo es una de las mujeres más conocidas del mundo entero: en ella recae también una de las monarquías que, aún en pleno siglo XXI, sigue vigente.

Esta mujer, de 95 años, tiene a su disposición todo tipo de alimentos y, contrario a lo que muchos creerían, no gusta de las extravagancias a la hora de merendar.

En entrevista con el diario británico ‘The Telegraph’, en 2018, Darren McGrady, antiguo chef privado de la realeza, afirmó que la monarca “come para vivir” la sencillez es una de las características de sus platillos.

Los encargados de alimentar a Isabel y a su familia preparan con anticipación los menús. La misma reina es quien elige entre las opciones.

Dicho cronograma se realiza con, mínimo, tres días de antelación.

A la hora del almuerzo suele ingerir comidas muy sencillas y bajas en calorías que, comúnmente, se componen de proteína y un mineral o una verdura de acompañamiento.

“Durante los días de semana normalmente incluye algo simple, como pescado con verduras o un simple pollo a la parrilla con ensalada”, comentó McGrady.

Ella también disfruta una de las bebidas típicas de este país: el . Como acompañamiento suele pedir alimentos ligeros como pepino, huevo o salmón ahumado, según lo dicho por el exchef real.

A la hora de la cena, suele preferir animales de caza como el gallo lira, el lagópodo escocés, la liebre europea, la perdiz nival, la perdiz roja o el faisán común. El consumo de estos animales está amparado por la legislación británica.

A pesar de tener una dieta bastante balanceada y sencilla, una revelación sorprendió a muchas personas que son fanáticas de uno de los condimentos naturales para casi todas las comidas: el ajo.

Este peculiar alimento, al parecer, no es soportado por la monarca.

“Durante años trabajando para ella, jamás hubo ajo en el menú. Odiaba su olor y su sabor”, comentó McGrady, quien, además de impartir órdenes en la cocina real durante mucho tiempo, redactó libros como ‘The Royal Chef at Home: Easy Seasonal Entertaining’ y ‘Eating Royally: Recipes and Remembrances from a Palace Kitchen’.